la nada misma

hacía mucho que no me iba de vacaciones. ahora así estoy, en un destino tan normal como Villa Gesell, pero me siento lejísimos de mi casa y de todo, todo me es ajeno y es una sensación muy linda, para que dure unas semanas al menos. sueño cosas, y cosas locas, todas las noches, en un cuarto que compartimos tres, de tres por tres. tuve que hacer cosas tan insólitas como pincharle la insulina al perro diabético de mi amiga. saqué fotos hermosas. y acá sigo por unos días más. cuando vuelva espero poder desarrollar todo, solo para no olvidarmelo nunca.