-Lo que pasa hija, es que después de tanto, es complicado encontrar un motivo por el cual vivir. ¿Qué me queda? Igual quedate tranquila, que no voy a matarme ni nada por el estilo.
-Muy tranquila me quedé.-
-¿Pero sabes qué? La isla en el Delta, ese podría ser mi objetivo. Seguramente va a ayudarme.
Si lo que mi papá quiere en una isla llena de mosquitos para estar en paz con su alma, una isla llena de mosquitoa tendremos.
martes, 11 de mayo de 2010
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Jajajaja, me parece que tu viejo está re podrido del ruido/afanos/contaminación/etc etc.
ResponderEliminarNo me iría al Delta, pero si me decís Entre Ríos, ni lo dudo.
Abrazo enorme.